Las escasisimas condiciones nos han hecho recurrir en pleno febrero a rutas mas propias de la primavera pero las ganas de esquiar nos pueden asique Paz, Marta y yo, nos fuimos al Puerto de San Glorio a buscar la lejana nieve.
En el puerto ni rastro de nieve, aunque era de esperar asiqu porteo por la Vega de Tarna y el Naranco hasta el pie de la subida al Boqueron de Bobias, donde podemos calzarnos los esquis y ya no nos les quitaremos hasta la cumbre. La subida al Boqueron por nieve ura aunque agarra muy bien, y al salir a la parte de arriba parece que nos teletransportamos a otra epoca donde la falta de nieve no era un problema.
Subimos a la derecha de la canaleta de Bobias, por palas que ya se van encarando al sol de media mañana y empiezan a transformar, el dia es excepcional con sol y ausencia de viento y solo se estropean estos momentos cuando al darnos la vuelta contemplarmos la pobre cobertura nivosa de la Cordillera para un mes de febrero, esto no es normal.
Al llegar al alto del Cubil del Can descubrimos ante nosotros la Reina de la cordillera Cantabrica, por donde saldran en unas horas nuestros amigos, que al mismo tiempo que nosotros, se encuentran inmersos en un placentero viaje sobre sus esquis por los solitarios valles que rodean Peña Prieta, espero que se lo aprenieran bien y otro dia me lleven a mi tambien :))))
Recorremos la cresta con esquis, disfrutandp de las vistas sobre la montaña palentina hasta hollar la cumbre del Tresprovincias.
Todavia es pronto, la nieve debe estar en su punto y nuestros compañeros todavia tardaran unas cuantas horas en aparecer tras la cumbre de Peña Prieta por lo que por unanimidad (dos mujeres contra uno) decidimos aprovechar y disfrutar de la gran esquiaa con la nieve en su mejor momento, la cumbre invernal de Peña Prieta tendra que esperar, aunque a cambio nos pegamos una esquiada brutal!!!! la nieve esta sencillamente perfecta y disfrutamos deslizandonos por una nieve primavera perfecta, pura crema.
Una vez abajo remontamos y "esquiamos" como podemos la bajada del Boqueron hasta la vega del Naranco, donde se acaba la nieve. Para volver al coche, ya que es pronto, remonto desde el Refugio de Tajahierro hasta el colladito de los Campanarios para aprovechar la nieve que guarda su cara norte y esquiar practicamente hasta el puerto, y aunque tuve que pagar cara la subida entre escobas a pleno sol, merecio la pena poder esquiar esta ultima palita para poner un broche final perfecto a un gran dia de esqui de travesia bien acompañado.
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