No tenia ni idea de que iba a hacer, la verdad es que estaba cansado de los dias anteriores, entrenando para el soplao, pero me apetecia mucho pasar un rato en la montaña.
Llegue al aparcamiento de Brañavieja sobre las 10 de la mañana, hacia un dia brutal, perfecto para los que acababan temporada en pistas, a los de las pieles de foca parece que todavia nos queda nieve para rato, asi que puse rumbo a el Cuchillon, o Peña del Pando, punto mas alto del circo de Alto Campoo.
Las pistas en esta zona ya han cerrado asi que bajo el telesilla biplaza retro del cuchillon unos pocos montaleros ascendiamos en total tranquilidad.
Despues de la zona de pistas encaramos de nuevo la parte superior, algo mas pelada de lo que estaba hace un mes pero todavia con nieve hasta los topes! (aunque es posible que la lluvia de estos dias le este haciendo mucho daño)
A medida que iba ascendiendo comenzaba a aparecer tras de mi Peña Sagra emergiendo tras el collado de la Fuente del Chivo
y poco a poco en una hora escasa llegue a la cima del Cuchillon a 2179m
No me gusta ir a la montaña solo, de hecho cuando tengo que hacerlo siempre voy a zonas de sobra conocidas y concurridas, y por supuesto, solo con buen tiempo. Si no hay gente cambio de planes. Aunque el domingo por el cuchillon andabamos unos cuantos en ese momento solo estaba yo alla arriba, a veces los momentos de tranquilidad y comunion con la montaña que se tienen en soledad son muy dificiles de repetir, ademas con el paso de los años a los amigos cada vez les resulta mas complicado el encontrar tiempo que pasar en la montaña, el trabajo, la distancia, la familia, cada vez mas compromisos y menos tiempo libre, y esto no ha hecho mas que empezar. Por eso hay que aprovechar cada segundo, y si no queda mas remedio que solo pues hay que aprender a disfrutar tambien de la soledad. (aunque seria muy hipocrita hablar de soledad tras el increible invierno que llevo junto a Paz, que ni la lluvia, la nieve o el hielo le han parado para acompañarme a cualquier lugar, eres la mejor!)
Tras un buen rato obnubilado me puse en marcha. La nieve estaba muy buena para caminar por ella asi que me decidi a seguir a dos montañeros que continuaban el cordal hacia el alto de las Hoyas, en direccion al Tres mares. Puse los esquis en la mochila y recorri el laberinto de bloques que compone la cresta hasta que la arista desciende hasta un amplio collado.
Collado por el que pase hace unos meses corriendo en el desafio campoo pero que aquel dia no pude disfrutar ya que la niebla nos envolvio hasta no ver mas alla de la siguiente marca.
Despues de un sencillo destrepe llegue al collado y me asome a las sures, a las palas que descienden hasta los bosques de la pernia
Desde este collado se puede continuar hasta el collado de los Asnos, aunque seguramente que habria que quitarse los esquis en varios puntos. A mi me apetecia hacer la bajada del castro desde arriba, que nunca la habia hecho, asi que quite las pieles y despues del ultimo vistazo a la meseta castellana me fui para abajo
La bajada cojonuda, crema primaveral como ya va siendo costumbre los ultimos fines de semanas, una maravilla. Y como ya habia cargado las pilas y hacia un domingo precioso con la misma para abajo, a comer pronto con la familia, domingazo!
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