Salimos de Pendilla sin tener muy claro hacia donde tirar, en cotas medias y altas habia bastante nieve e incluso parecia que habia caido una pequeña nevada la noche anterior, pero en cotas bajas escaseaba. Pensando en asegurar nos dirigimos por el conocido Valle de Bustamores hacia el tresconcejos, pensando en quizas desde la cabecera del valle ir haca el Cueto de los Barriales o el Estorbin, pero cuando llegamos al cruce del arroyo que baja de la cara norte del Cellon decidimos probar...
A medida que nos adentramos en el valle comprobamos que la nevada no habia sido mala, y que buscando las orientaciones propicias igual nos pegabamos una buena esquiada. Subimos por la margen derecha orografica, entre peueños bosques de acebos, hasta llegar a un llano al pie de las montañas mas altas del valle, desde alli nos dirigimos directos al Cellon, que ya habiamos subido otras veces por la vertiente de Pajares. En las ultimas pendientes antes de llegar a la divisoria comprobamos que el viento habia barrido parte de la nieve recien caida, dejando practicamente descubierta la capa de nieve dura que habia debajo, asique para el ultimo tramo pusimos los esquis en las mochilas y completamos lo que nos quedaba hasta la cumbre con crampones, para darle un toque montañero a la ascension. Desde la cumbre aunque el cielo estaba cubierto de nubes altas, pudimos disfrutar de buenas vistas hacia el norte. Nos preparamos y aprovechando los claros de sol nos lanzamos de nuevo hacia el valle, por buenas palas de nieve polvo, de las que se disfrutan el doble sabiendo lo que cuesta siempre pillar esta nieve en nuestra querida cordillera. A pesar de que en algunos momentos la luz no era la mejor pudimos aprovechar bien la bajada. En la parte de abajo incluso nos volvio a salir un poco el sol, para acabar de disfrutar el dia a lo grande, otro bonito recuerdo de otro buen dia en la montaña!
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