lunes, 28 de mayo de 2012

Ein Mittag im Hohjoch 26-5-12


Este fin de semana me propuse cambiar el esquí por el trekking, aun queda nieve pero me apetecía conocer sitios diferentes apartados de los sitios típicos de esquí así que el sábado me dirigí a una zona del macizo de Karwendel Alpen a la que se llega por una carretera que abre solo a partir del 1 de mayo, hasta Eng Alm, un pequeño pueblo situado en el fondo de un precioso valle decorado con los intensos verdes de la primavera alpina y rodeado de paredes calizas que me hacían recordar mis queridos Picos de Europa.
La idea era la de pasar un par de días por este macizo con Eng como campamento base y desde allí realizar alguna de las rutas que salen desde allí. Sin prisas, simplemente a disfrutar de la montaña, caminando, corriendo, descansando o simplemente estando en la montaña.

En el pueblo simplemente hay un par de hoteles pequeños, una fabrica de quesos (de las mejores de esta zona con varios premios de caracter internacional) y unas cuantas cabañas mas. El valle tiene orientación norte sur con salida por el noroeste y el rio que nace al pie de las montañas mas adelante se une con el Isar, que tras pasar por Munchen desemboca en el Danubio a la altura de Degendorf.

El grupo de Karwendel o Karwendelvolgebirge, se extiendo desde Mittenwald al oeste hasta el Achensee al este, al norte con el inicio de la llanura Bávara y al sur con el Inntal,o valle del Inn, por lo que detrás de los gigantes calizos que se alzan sobre Eng se encuentra Innsbruck.

Yo llegue al mediodía y sin saber muy bien a donde me deje llevar por los numerosos caminos, cruzándome con mucha gente, la mayoría de ellos ya de vuelta. Avance hacia el suroeste por un precioso camino que se elevaba paralelo al Enger Grundbach (Bach: riachuelo) en la vertiente opuesta del pequeño vallejo a la que se encuentra la imponente cara norte del Grubenkarspitze en cuya base habían unas pedreras que me recordaban a las de Peña Olvidada...

 Caminando inicialmente por el bosque para mas adelante al ganar altura llegar a una pradera donde se empezaban a ver los primeros neveros...al fondo se divisa el Hohjoch (joch: collado) con bastante nieve asi que a por el!

Al llegar al collado a 1786m que con la luz del atardecer tenia un aspecto mágico!vi las primeras huellas de esquís recientes que me hicieron empezar a sospechar...pero bueno, rápidamente me olvide al aparecer ante mi la otra vertiente del collado, hacia el oeste, con el sol ya cayendo por poniente y dejando una imagen preciosa del resto del Karwendel con el Laliderer Tal en primer plano y su refugio Falkenhutte, todavía cerrado en esta época del año debido a la cantidad de nieve acumulada. Asi que me senté, me hice un bocadillo de jamón y me dedique a disfrutar..




Era sorprendente la cantidad de nieve acumulada en la base de estas paredes, incluso a cotas bajas de 1400 o 1500m, pero es que estas peñas tienen que dar mucha sombra!

Como aun era pronto me propuse rodear el Gumpenspitze por el este y llegar hasta el siguiente collado, el Gumpenjochl para desde allí bajar directamente por una canal hasta Eng de nuevo como había visto en mi libro.

En la foto que hice al dia siguiente se puede ver en amarillo el recorrido que hice desde Eng subiendo por el valle de la izquierda hasta el primer collado y luego la diagonal rodeando la montaña hasta el segundo collado, en rojo la canal que tenia pensado para bajar hasta Eng aunque finalmente decidi volver sobre mis pasos

Nada mas comenzar a rodear el Gumpenspitze apareció ante mi un grupo de cabañas que aunque yo pensaba deshabitadas al acercarme me di cuenta de que unos cuantos montañeros se encontraban en ellas, con el fuego encendido, unas cervezas y preparando la cena, un grupo de amigos pasando unos días en la montaña rodeados de la mas absoluta soledad, realmente me dieron mucha envidia y me acorde de mis amigos y de como me gustaría que estuvieran aquí conmigo, viendo lo que yo veía y disfrutando como yo lo estaba haciendo!

Yo continué hacia mi objetivo por una zona en la que había leído que habían muchos rebecos y no se hicieron de rogar, a esta hora del día, con el frescor del atardecer pronto en cada risco apareció un animal observándome. Realmente tenia muchas ganas de verles ya que hacia varios meses que no veía ninguno y son mi animal favorito, si algún día soy un animal yo quiero ser un rebeco! Gracias al viento en contra algunos no me sintieron y pude verles desde realmente cerca, una maravilla.







Poco después al llegar a las cercanías del Gumpenjochl comprobé que la canal por que tenia pensado bajar tenia bastante nieve y la entrada superior no estaba clara así que ningún problema!media vuelta sobre mis propios pasos que había tiempo de sobra! 
De nuevo me cruce con muchos rebecos e incluso algún ciervo se asomaba desde el bosque, junto con las luces del atardecer aquello era un espectáculo difícil de describir

Pase de nuevo por las cabañas y llegue al collado anterior, desde aquí 4 kilómetros de bajada hasta el coche que complete corriendo y saltando como un rebeco mas, adelantando a los ultimos excursionistas que como yo no querían perderse este espectáculo, y lleno de energía llegue al coche todavía con el sol coloreando de naranja las cumbres mas altas orientadas al oeste. Así que me busque un habitación y tras estudiarme los mapas y las diferentes posibilidades para el día siguiente me fui a dormir sin la mas mínima idea de lo que haría por la mañana siguiente pero con una sonrisa de oreja a oreja, ya mañana improvisare algo!



2 comentarios:

  1. Me ha encantado este dia!! precioso!! y no te preocupes... que estuvimos alli contigo!!! ademas tiempo tenemos de hacer de esas por nuestra Cordillera!

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